El desarrollo integral de los niños y jóvenes en México es un objetivo estratégico de primeramagnitud, no sólo es un indicador de los niveles de desarrollo y bienestar alcanzados, sino también venideros.Los sistemas educativos forman, efectivamente, a profesionales, pero sobre todo a ciudadanos que puedan participar de manera consciente y activa en el progresodela comunidad a la que pertenecen.