Es un tópico neoliberal decir que la información es el “nuevo petróleo” de la época contemporánea. Se pronuncia esa expresión en un contexto marcado por la era de la información, donde las cada vez más crecientes industrias de la información y la comunicación juegan un rol crucial en la economía y sociedad actual. Por ello es que la tendencia a caracterizar la dinámica del mundo hasta el presente toma de referencia una variable intersectorial y omnipresente: la información.