En 1974, con la creación del Colegio de Historia en la Facultad de Filosofía y Letras, la disciplina histórica en Nuevo León entró en un proceso de profesionalización que se consolidaría en la década siguiente, cuando aparecieron las primeras tesis de historia. Entre ellas destacó “La política de Vidaurri y la expulsión de las tribus nómadas en el noreste de México”, investigación defendida en 1983 por el entonces alumno José Reséndiz Balderas.