La ciencia natural importa cada día más para nuestra comprensión de las cosas y de nosotros mismos, así como para nuestra gestión del planeta; por eso ha llegado a ser tema primordial de reflexión filosófica, que, además de aquilatar el papel de la ciencia natural en el sistema de la civilización, busca elucidar los conceptos y enfrentar los métodos necesarios para que la ciencia prospere.