Así comienza una bella melodía italiana que se hizo famosa en 1975. Aún vemos los trenes, pero como testigos no como viajeros. Desde fines de 1999 dejaron de dar servicio a los pasajeros, tan solo sirven ahora para llevar y traer carga. Entonces, todas las estaciones y puntos de servicio y mantenimiento desaparecieron, se convirtieron en estructuras fantasmales que vieron alguna vez, vida, movimiento, trajinar, penas, despedidas así como alegrías.